junio 11, 2018

HELADO DE PIÑA COLADA


¡¡¡Muy buenos días!!! Esta semana es de esas moviditas, tipo non stop, ya que mi peque cumple 2 añitos y estoy en pleno proceso de la creación de lo que será su tarta de cumpleaños. Una cosa tengo clara, llevará personajes infantiles y será completamente comestible.
¡Ah! otra cosita más, No llevará fondant.

Ya tengo el diseño casi terminado, ahora solo me queda meterme en la cocina y plasmarlo entre harina, mantequilla.......

Pero ahora centrémonos en la receta de esta semana, que la tarta en cuanto la tenga os la compartiré por RRSS.
Esta semana os traigo un helado refrescante, cremoso y explosivo en sabor.
Es una receta muy sencilla y la piña no hace falta que sea fresca, puede ser congelada o en lata en su jugo. Si esta receta la van a consumir niños utilizad el extracto pero en el caso que esta receta NO la vaya a consumir niños podéis sustituir el extracto de piña colada por licor de coco  (tipo Malibú o Coco loco).

En la preparación os explico como preparar nuestro helado sin necesidad de tener heladera, es un poco más lento que utilizando la heladera. También os comento que el tiempo puede variar según el tipo de heladera que utilicéis cuando mantequéis vuestra crema.
La leche de coco tiene que ser esa que van el lata, no sirven las bebidas de coco y recordad de agitar bién la lata para que las dos partes se mezclen  ( el agua y la pasta de coco).



Por ultimo os quería comentar,  que esta receta también la tenéis disponible en movimiento en mi canal de Youtube  y también esta sacada del libro de  Helados caseros de Verónica Losada os likeos el enlace por si queréis saber más sobre el libro.

Ahora ya os dejo con la lista de ingredientes y la preparación.

Ingredientes

140 g de piña troceada y pelada
120 g de azúcar
150 ml de leche de coco
250 ml de nata para montar (35,1% M.G) bién fría
1/2 cucharadita de extracto de piña colada o 40 ml de licor de coco




Preparación

En un vaso para batidora trituraremos la piña, la leche de coco, el azúcar y el extracto de piña colada. Esto lo haremos hasta que todos los ingredientes estén bién mezclamos y triturados.

Por otro lado montamos la nata, esta tiene que estar bién fría para que quede bién montada.

Ahora solo nos quedará mezclar las dos preparaciones con movimientos envolventes, esto nos ayudará  a que nuestro helado quede aireado y a la hora de mantecarlo este no se cristalice.

Vertemos en la heladera la crema y mantecamos unos 30 minutos. En el caso que no tengamos heladera lo realizaremos de la siguiente manera:
 En un recipiente hermético a poder ser forrado con papel sulfurizado ( papel de horno) verteremos nuestra crema, llevaremos al congelador 1 hora y pasada esa hora sacaremos el recipiente del congelador, batiremos con unas varillas eléctrica y volveremos a llevar nuevamente al congelador otra hora. Estos pasos los realizaremos 2 veces más y dejaremos en el congelador hasta que lo vayamos a consumir.



Cuando queramos hacer bolas de helado, os recomiendo que saquéis el recipiente del congelador unos minutos antes y sumergir en agua muy caliente nuestra cuchara para hacer bolas de helado.
Es algo sencillo, pero esto os ayudará a que os salgan una bolas de helado preciosas.


Aquí os dejo como siempre la ventanita para que disfrutéis de la receta en formato vídeo.



Nos vemos la semana que viene con otra nueva receta.
Besosssss.

junio 04, 2018

CHARLOTA DE MASCARPONE Y NECTARINAS


¡¡Muy buenos días de lunes!! Estrenamos la primera semana de Junio y parece mentira que hace nada empezábamos un nuevo año frío, con lluvia y nieve. Y ahora ya nos hemos comido la mitad de este 2018, no sé si os pasa lo mismo a vosotr@s pero desde que tengo hijos la vida, mi vida pasa a velocidad rayo....como si todo el día estuviese volando entre nubes sin tiempo de poner los pies en el suelo para notar su frío, humedad o calor. Si os pasa lo mismo me encantaría que lo compartierais.

La semana pasada fue una de esas en las que haces algunas cosas por primera vez....me hice mi primer tatuaje (después de 15 años pensando que hacerme), la primera vez que me subí en un car y corrí / volé quitándome miedos, ansiedades y temores que muchas veces me guardo para hacerme la fuerte.
Y sabéis que, fue liberador pensar que los miedos se van afrontándolos de cara y con dos pares de ..... El miedo solo es algo que nos paraliza y no nos deja avanzar hacia delante.


Porque todo esto, por que seguramente much@s de vosotr@s al ver la receta de esta semana os habrá entrado "miedo" o habréis obviado la receta  y habréis pensado....... buafff esta receta es muy chunga de hacer!!! pero nada es lo que parece y si yo pude, tu también la podrás hacer.
Que vas a necesitar para hacerla.....saber esperar, para que la crema de mascarpone y más tarde la gelée cuajen lo necesario o suficiente.
Los ingredientes lo podéis encontrar en cualquier supermercado, hasta las nectarinas que estamos en plena temporada pero en el caso que no os guste su sabor lo podéis cambiar por melocotones, paraguayos aunque los tendréis que pelar. Pero las nectarinas le da ese toque entre dulce y un pelin ácido, que junto con la crema de mascarpone le da ese perfecto equilibrio.

Si os surgen dudas durante la preparación también podéis verla en formato vídeo en la ventanita que tenéis más abajo al final del post, también podéis dejar un comentario para que os pueda resolver cualquier duda.

Ahora os dejo con la lista de ingredientes, la preparación y alguna fotito más de la receta.

Ingredientes

350 g de queso mascarpone
180 g de leche condensada
15 bizcochos de soletilla
3 nectarinas pequeñas
150 ml de agua
100 g de azúcar blanco
2 láminas de gelatina


Preparación

Lavamos las nectarinas y las cortamos a gajos finos.
En un cazo ponemos a calentar el azúcar junto con el agua y cuando esté completamente disuelto el azúcar añadimos las nectarinas, bajamos el fuego y cocinamos unos 20 minutos a fuego bajo ( será como una especie de almíbar).
Por otro lado batimos con las varillas el mascarpone con la leche condensada hasta que obtengamos una consistencia cremosa y aireada.
Cuando ya tengamos las nectarinas listas ( será cuando estás estén translúcidas) las escurrimos  (reservándolas para más adelante ) y reservando el almíbar para remojar los bizcochos de soletilla.

Preparamos un aro metálico de unos 15 cm encima de una plato plano o una base de tartas, esto nos servirá como guía o para que nuestra charlota nos quede perfecta.

Cortamos una de las puntas de nuestros bizcochos de soletilla, intentando que todos tengan la misma longitud,  para que estos se puedan quedar de pié uno al lado del otro. Las puntas NO las tiramos, sino que las reservamos para ponerlas como base de nuestro postre.


Vamos remojando los bizcochos dentro del almíbar, retirando el exceso y los vamos colocando dentro de nuestro aro metálico formando un circulo. Cuando ya tengamos todos los bizcochos colocados será el momento de hacer lo mismo con las puntas, pero estas las colocaremos en el fondo a modo de base.
Rellenamos con la crema de mascarpone nuestra charlota, esta la rellenaremos un poco más de la mitad, con cuidado de no manchar los bizcochos, nos podemos ayudar de una manga pastelera. Alisamos la superficie con una espátula y la llevamos a la nevera unos 30 minutos.

Mientras que se enfría la charlota prepararemos la gelée. Hidrataremos las láminas de gelatina con agua fría y pondremos a calentar el almíbar al fuego. Añadimos las láminas de gelatina ya hidratadas y removemos hasta que estas se disuelvan. Trituramos las nectarinas junto el almíbar y dejamos que se enfríe hasta que esté a temperatura ambiente.

Después de 30 minutos sacamos la charlota de la nevera y ayudándonos de una cuchara verteremos  por encima la gelée de manera uniforme por toda la superficie.
Llevamos al congelador un mínimo de 3 horas (para tener una versión de semifrio) y la sacamos 30 minutos antes de consumir del congelador.





Aquí os dejo la ventanita de la receta en formato vídeo para que la disfrutéis en movimiento.



Espero que os haya gustado y nos vemos la próxima semana con otra nueva receta.

mayo 28, 2018

HELADO DE AVELLANAS Y CHOCOLATE


¡¡Muy buenos días!! Por fin empiezan mis vacaciones estudiantiles, no os podéis imaginar lo descansada que me he quedado después de ver que me e quitado esa dichosa asignatura que me llevaba de cabeza desde hace dos semestres. ¡¡¡Uffff que descanso!!!

Cambiando de tema. El pasado miércoles o jueves os pregunté por Instagram que receta os apetecía para hoy. Os dí dos opciones, la primera una charlota y la segunda este helado, como veis ganó el helado por goleada.

Así que  por fin inauguramos  temporada de helados, sorbetes, granizados y todo tipo de recetas frías, no sé vostr@s pero yo estaba deseando y tenia unas ansias vivas de empezar con este tipo de recetas.

Os voy a contar un poco sobre la receta, esta receta esta sacada de un libro que descubrí y me auto-regalé en San Jordi el pasado mes de Abril ( en otro sitios es el día del libro) el libro es de Verónica Losada y es una de esas maravillas que uno se encuentra sin buscar, dejándote con unas ganas tremendas de ponerte a probar cada una de las recetas que componen el libro. Aunque parezca mentira me he pasado un mes esperando este momento de poderos compartir algunas recetas de este libro y esta es una de las primeras de la lista. En esta receta se junta dos ingredientes que juntos me encantan, las avellanas y el chocolate, os suena o recuerda a algo...... Os refresco la memoria, a la nocilla saludable. ¡¡¡YAASSSS!!!



Si en este momento empiezan a surgiros las dudadas típicas de....
-Vale, pero yo no tengo heladera así que como lo hago.
-Me quedará igual aunque no tenga heladera
-El chocolate tiene que ser de un porcentaje en concreto de cacao

A todas vuestras dudas os respondo en un  tris.....
-Si, no hace falta que tengáis heladera lo único que os ahorra tiempo a la hora de solidificar el helado.
-Os quedará exactamente igual siempre que sigáis los pasos al pie del dedillo (abajo en la preparación os lo explico sin heladera) Congelador 1 hora, batir con varillas eléctricas, congelador y repetir esto 2 veces más.
-No hace falta que tenga un porcentaje de cacao en concreto pero si que debe ser negro y fácil de fundir.

Aunque en esta foto no esta bién mantecado el helado, ya que le faltaban unos minutos y el ansias ( que es mala consejera) me pudo sacarla antes de tiempo de la heladera. El sabor de este helado es increíble  y cuando empiezas te cuesta la vida parar. Bueno, cuando te has comido la tarrina entera de nada más y nada menos de medio kilo.

Como seguramente estaréis deseando poneros a preparar la receta, voy a dejar de enrollarme y os voy a dejar con la lista de ingredientes.
También tenéis esta receta en formato vídeo, como siempre tenéis la ventanita en el final del post.

Ingredientes

2 yemas de huevo
90 g de avellanas tostadas
115 ml de leche entera
200 ml de nata para montar 35,1% M.G
120 g de azúcar
110 g de chocolate negro
1 pizca de sal




Preparación

En un procesador de alimentos trituramos las avellanas hasta obtener una especie de pasta.
Vertemos en un cazo la leche, la  mitad de nata (100 ml) y la pizca de sal. Llevamos al fuego hasta que empiece a hervir.
Por otro lado, mezclaremos las yemas con el azúcar hasta que estas empiecen a blanquear y aumenten de volumen.

A la mezcla que tenemos en el cazo hirviendo ( leche, nata, sal) le añadimos la pasta de avellana hasta que estén  incorporadas y seguidamente añadimos las yemas blanqueadas hasta formar una mezcla homogénea. Bajamos el fuego a medio -bajo y sin dejar de remover espesamos la mezcla.
Una vez que la tengamos ligeramente espesa, la retiramos del fuego para que enfríe.

En un bol o cuenco derretimos en el microondas el chocolate junto con la otra mitad de nata (100ml) en intervalos de 30 segundos, removiendo entre cada intervalo.
Añadimos la preparación del cazo al bol o cuenco del  chocolate y removemos hasta que estén todos los ingredientes bién integrados.

Tapamos el bol o cuenco con film transparente a piel ( contactando con lo que será nuestro helado) y dejamos enfriar toda la noche en la nevera.

Al día siguiente vertemos la crema en nuestra heladera y mantecamos nuestro helado ( esto puede tardar unos 30 minutos dependiendo de la heladera)
Para conservarlo, vertemos el helado en un recipiente hermético y lo llevamos al congelador. A la hora de consumirlo los sacamos unos minutos antes para que el helado se ablande un poco.

En el caso que no tengamos heladera.......Vertemos la mezcla en un recipiente hermético y llevamos al congelador 1 hora, pasadas esa 1 hora sacamos el recipiente y con las varillas eléctricas batimos unos segundos para aportarle aire a la mezcla y para que el helado no se cristalice. Volvemos a llevar al congelador y realizamos lo mismo 2 veces más.



Aquí os dejo la ventanita para que la veáis también en formato vídeo.




Espero que disfrutéis de la receta y que os guste tanto como a mí. Nos vemos la semana que viene con otra nueva receta.
Millones de besos.

mayo 14, 2018

BIZCOCHO DE NARANJA


¡¡¡Buenos días!!! Esta semana os traigo una receta sencilla pero con una miga super esponjosa y jugosa.

La receta que tenia en mente publicar era otra, pero una vez preparada no me gustó el resultado final y decidí desecharla del blog.

Esta receta en principio era una prueba a modo reciclaje, ya que tenia unas cuantas naranjas por casa que empezaba la piel  a ponerse como seca/dura y como por dentro estaban perfectas decidí hacer algo con ellas. Lo que tenia claro que no quería complicarme mucho, pensé en una mousse o en un helado pero últimamente voy con falta de tiempo y no tenia ganas de estar mil horas en la cocina cocinando. Así que lo que menos complicación tenia era hacer un bizcocho y como en el blog no tengo ninguno de naranja, así tal cual.....he decidido publicarlo para también vosotr@s podáis disfrutarlo antes de que venga esa calor sofocante, ya que la primavera no decide en hacer presencia.


De paso que también estrenaba el molde de bundt cake que hacia tela de tiempo que compré y aún no había tenido tiempo de estrenar, así mataba a dos pájaros de un tiro.




Seguramente esta semana estaré un poco desaparecida por las redes ya que estoy con exámenes finales y estoy /intento poner toda mi energía en aprobar para poder empezar mis "dulces vacaciones". Así que si no me veis por RRSS es que estoy hincando codos en la biblioteca como las buenas y ya de paso mandarme pensamientos positivos para aprobar a la primera este Sábado.

La receta también la tenéis en formato vídeo para que la disfrutéis en otro formato, como siempre al final del post os dejo la ventanita. Os dejo con la receta.

Ingredientes

150 ml de aceite de girasol o de oliva suave
200 ml de zumo de naranja recién exprimido (2 o 3 naranjas)
180 g de azúcar
350 g de harina
1 cucharadita de levadura
la ralladura de 1 naranja
3 huevos L
1 pizca de sal



Preparación

En el bol  de la batidora batimos los huevos hasta que empiecen a espumar y añadimos el azúcar. Batir hasta que la mezcla doble de volumen y blanquee.
Añadimos el aceite sin dejar de batir, la ralladura de naranja y  seguimos batiendo unos segundos.
Tamizamos la harina junto la levadura en el mismo bol y añadimos la pizca de sal. Mezclamos con la batidora apagada para no formar una nube de harina y seguidamente añadimos el zumo de naranja  sin dejar de batir a velocidad media.
Engrasamos con spray desmoldante o mantequilla un molde de unos 20-22 cm redondo, rectangular o cuadrado. En mi caso e utilizado un molde para bundt cake que estaba desenado estrenar desde hace mil años.
Vertemos la masa en el molde. Le damos unos golpecitos al molde para que la masa llegue a todos lo huecos y también para que la superficie se que lisa.

Horneamos 180º unos 30-35 minutos con calor arriba y abajo sin aire.

Una vez horneado dejamos reposar unos minutos el bizcocho en el molde, ya que esto nos facilitará el desmoldado y dejamos enfriar por completo sobre una rejilla.


Aquí tenéis la ventanita para verla en formato vídeo.




Por cierto no sé si la semana que viene habrá receta, os aviso de ante mano porque hacer la receta, grabarla, editarla, hacer las fotos y un largo etcétera no me dará la vida para hacerla en un día.

Millones de besos 

abril 23, 2018

GALLETAS DE PLÁTANO Y COCO CON CHISPAS DE CHOCOLATE


¡¡Buenos días!! Después de varias semanas de recetas con más elaboración o más trabajosas.....Esta semana e pensado en algo más sencillo y para elaborar/ entretener a los más peques de la casa, mientras llega el buen tiempo cosa que se está haciendo de rogar.
En el blog tenéis un montón de variedad de recetas de galletas; las típicas cookies, veganas, de avena, rellenas, decoradas, sin lactosa, rebozadas, de pistola , de dos colores, de leche condensada y así podría seguir...... Como el mismo nombre del blog evoca lo que más predomina en él son las galletas.

Así que si sois como yo, galleta adict@s este es vuestro blog ( aquí haciendo spoiler a tope)


Es una receta super rápida de hacer y seguramente casi todos los ingredientes los tenéis por casa. En el caso que no tengáis alguno como la leche de coco o el coco en copos lo podéis sustituir por otra vegetal pero perderá ese punto a sabor a coco pero no variará el resultado final.
La textura de estas galletas son de esas ternitas de corazón y crujiente por los bordes, pero si hacéis las porciones más pequeñas y las extendéis un poco con el dorso de una cuchara os saldrán más crujientes.
Si, si no paro de hablaros de la textura pero no os hablo del sabor y es que os podría contar maravillas ( siempre y cuando os guste el plátano) ya que el sabor que más predominante es el plátano y tiene pequeños ápices de coco. Las chips de chocolate le dan ese toque adictivo que te hace comente una detrás de otra hasta que te das cuentas que te has comido más de la mitad.


Lo mismo me pasó cuando me puse a fotografiarlas, que me puse hacer una foto tras otras y cada cual más bonita. El problema venido cuando me ha tocado elegir las que formarían parte del post.
No os exagero pero e acabado con una lista de unas 15 fotos de 20 que hice y me ha sido super compilado desechar las 11 restantes pero suerte que esta vez la receta también va en formato vídeo así que ahí pondré una gran parte de las fotos restantes, para quitarme ese así viva de bonicura.


Como siempre os compartiré la ventanita del vídeo al final del post y en las RRSS.

Sin más dilación os dejo con la receta.


Ingredientes (16-24 unidades)

90g de mantequilla en textura pomada
300 g de haria
225 g de azúcar
1 y 1/2 de plátano maduro
1 cucharadita de vainilla
1 cucharadita de levadura o impulsor
100 g de chispas de chocolate
2 cucharadas de bebida de coco
30 g de coco copos
1 pizca de sal


Preparación

Ponemos a precalentar el horno a 180º.

En un bol batiremos la mantequilla junto con el azúcar, hasta que empiece a quedar una textura ligeramente cremosa.
Añadimos los plátanos triturados o bién chafados con el tenedor, la leche/bebida de coco y la vainilla.Batimos unos segundos hasta que todos los ingredientes estén bién incorporados.

Tamizamos la harina, junto con la levadura o impulsor y la pizca de sal. Mezclamos hasta obtener una mezcla homogénea.
Añadimos una gran parte de las chispas de chocolate, reservando unas pocas para colocar sobre las galletas sin hornear y los copos de coco. Mezclamos ayudándonos de una espátula.

Preparamos un par de bandejas de horno con papel de horno y ayudándonos con una cuchara dispondremos pequeños montones de masa de la medida de una nuez, colocamos un poco de chispas de chocolate en cada montón (esto es opcional) y llevamos al horno unos 15 minutos.
Una vez horneadas las galletas las dejamos que enfríe por completo en ella ( aún estarán blanditas para manipularlas).

Las podemos conservar en una lata para galletas o en un recipiente hermético durante 2 semanas.





Aquí tenéis la receta en formato vídeo.



Nos vemos las semana que viene con otra nueva receta.

Besosss a puñados.

marzo 26, 2018

ROSQUILLAS DE NARANJA Y MANZANA


¡¡¡Muy buenos días de lunes !!! Aunque aún se está resistiendo un poco en venir la primavera y empezamos a tener los primeros rallitos de sol que hacen que nos paremos unos segundo frente a él para que nuestro cuerpo empiece a absorber su energía. Y después de nuevamente sufrir el cambio de hora, que a mi personalmente me provoca una hecatombe el cual mi cuerpo necesita semanas para volver a un estado "normal" y siempre me lleva a pensar lo mismo.... porque demonios lo seguirán haciendo cuando hoy en día la gran mayoría de fabricas funcionan las 24 horas y no se produce un ahorro de energía.

Pero ahora vamos a lo que vamos.
A finales de la  semana pasada  os compartí una receta de  pestiños al horno (os comparto el enlace), pues bién esta semana para completar mis sugerencia o añadir al recetario del blog algunos dulces más sobre temática tradición o mejor dicho Semana Santa me vinieron a la cabeza estas rosquillas con un punto diferente a las tradicionales. Estas se preparan igual que las tradicionales ( fritas en abundante aceite) pero en este caso la masa lleva un par de ingredientes que le dan ese toque diferente, ya que al pegarle un bocado te encuentras esos pequeños trocitos de almendras que le dan un toque más crujientón y con la manzana que le aporta jugosidad, hacen de estas rosquillas una maravilla.

Como voy con poco tiempo porque tengo a los dos peques en casa y esto hace que vaya a toda velocidad escribiendo (perdonad si hay faltas de ortografías y palabras mal escritas o a medio escribir), no me voy a enrollar más y os voy a dejar con la receta.

Ingredientes

El zumo y la ralladura de 1 naranja
530 g de harina
30 g de almendras picadas
2 huevos
1 manzana triturada o licuada
70 g de azúcar
100 ml de aceite de oliva
1 taponcito de anís ( yo e utilizado el mismo de la botella)
1/2 cucharadita de canela
Aceite de girasol para freír las rosquillas
Azúcar y 1 cucharadita de canela para rebozarlas



Preparación

En un bol amplio batimos los huevos con el azúcar. Añadimos a la mezcla el aceite, el anís, la canela y mezclamos unos segundos con las varillas.
Rallamos la piel de la naranja y exprimimos su zumo. Añadimos a la masa, mezclamos y seguidamente añadimos la manzana triturada o licuada, mezclamos unos segundos más.
Ahora iremos añadiendo poco a poco la harina que previamente habremos tamizado, las almendras y amasaremos hasta que la masa se despegue del bol o se desprenda de nuestras manos.

Dividimos la masa en pequeñas porciones y formaremos tiras cilíndricas las cuales uniremos sus extremos para formar las rosquillas.

En una sartén onda o el un cazo amplio calentaremos el aceite junto un poco de piel de naranja ( lo de la piel de naranja es opcional), calentaremos sin dejar que humee. Introduciremos las rosquillas e iremos dorándolas y girándolas con la ayuda de una espátula para que se doren por todos sus lados.
Os recomiendo que el fuego no esté muy fuerte ( fuego medio) ya que podrían dorarse pero quedar crudas por dentro.

Dejamos enfriar sobre papel absorbente y seguidamente las rebozamos el azúcar con una cucharada de canela.



Me despido a toda velocidad que estos dos están muy callados y cuando callan otorgan ( si sois padres/madres ya me entendéis).



Nos vemos la próxima semana con otra nueva receta.
Besossssss

marzo 22, 2018

PESTIÑOS AL HORNO


Buenos días de jueves!!! Sí, si de jueves.Aunque siempre publico los lunes esta semana de extra os traigo otra receta. Como estamos a nada de la Semana Santa y la semana que viene me será más complicado estar más activa por las redes sociales, ya que los críos tienen fiesta y me sería más difícil compartiros las dos recetas que he preparado para esta festividad, se me a ocurrido compartiros una esta semana y la otra como siempre el lunes que viene.
Las dos recetas también las tendréis disponibles en formato vídeo en mi canal de Youtube para los que no os gusta esto de leer tanto.

Como podéis leer en la entrada de la receta, os traigo una receta muy muy tradicional pero está preparada de manera diferente. Ahora viene y si es tradicional como puede ser diferente, pues muy sencilla, esta receta está preparada en el horno y no como la receta tradicional que se hace fritas en abundante aceite como los churros, las rosquillas,las torrijas, etc.

Yo al principio tenia mis dudas pero unas vez preparadas todas esas dudas se enfusaron, el sabor es exactamente igual pero el inconveniente o en mi caso es todo lo contrario ya que son muchísimos más saludables, sería que no son tan aceitosos aunque a muchas personas le gusta ese punto de chop-chop como suelo decir yo.

La dificultad de la receta es mínima y la tendréis preparada en menos de media hora contando hasta el horneado.

Si os animáis hacer la receta y encontráis alguna diferencia en sabor o textura me encantaría que me lo hicieseis saber, ya que en mi caso no la e notado  quitando como os e comentado más arriba el tema de aceitosos.

Sin más rodeos os dejo con la receta.



Ingredientes

275 g de harina
70 ml de licor de anís
80 ml de vino blanco
1 naranja ( la cascara)
15 g de anís verde en grano
20 g de sésamo o ajonjolí
100 ml de aceite de oliva
250 g de miel

Preparación

En un cazo calentamos el aceite junto con la cáscara de naranja para aromatizarlo.
En un bol amplio pendremos la harina y añadimos el aceite (sin la cáscara), removemos con una cuchara de palo, hasta que los ingredientes estén integrados.

Ahora añadimos el licor de anís, el vino blanco y amasamos. Integramos el sésamo y los granos de anís, amasamos hasta que tengamos una masa suave.

Enharinamos la superficie de trabajo y estiramos la masa en una plancha cuadrada de un grosor de 1 mm.
Ponemos a precalentar el horno a 200º.

Cortamos la masa en porciones cuadradas de unos 8 cm (nos podemos ayudar con un cortador de pizza). Doblamos los lados opuestos, llevándola al centro y superponiendo uno sobre el otro. Las depositamos sobre la bandeja de horno con papel de horno y horneamos entre 10 -15 minutos.
Dejamos que templen y bañamos nuestros pestiños con la miel.

Podemos conservarlos en una lata forrada con papel de horno.



Os dejo también la ventanita de la vídeo receta, justo aquí abajo.



Espero que disfrutéis de la receta, nos vemos el lunes con otra receta para Semana Santa.
Besosssss