mayo 14, 2018

BIZCOCHO DE NARANJA


¡¡¡Buenos días!!! Esta semana os traigo una receta sencilla pero con una miga super esponjosa y jugosa.

La receta que tenia en mente publicar era otra, pero una vez preparada no me gustó el resultado final y decidí desecharla del blog.

Esta receta en principio era una prueba a modo reciclaje, ya que tenia unas cuantas naranjas por casa que empezaba la piel  a ponerse como seca/dura y como por dentro estaban perfectas decidí hacer algo con ellas. Lo que tenia claro que no quería complicarme mucho, pensé en una mousse o en un helado pero últimamente voy con falta de tiempo y no tenia ganas de estar mil horas en la cocina cocinando. Así que lo que menos complicación tenia era hacer un bizcocho y como en el blog no tengo ninguno de naranja, así tal cual.....he decidido publicarlo para también vosotr@s podáis disfrutarlo antes de que venga esa calor sofocante, ya que la primavera no decide en hacer presencia.


De paso que también estrenaba el molde de bundt cake que hacia tela de tiempo que compré y aún no había tenido tiempo de estrenar, así mataba a dos pájaros de un tiro.




Seguramente esta semana estaré un poco desaparecida por las redes ya que estoy con exámenes finales y estoy /intento poner toda mi energía en aprobar para poder empezar mis "dulces vacaciones". Así que si no me veis por RRSS es que estoy hincando codos en la biblioteca como las buenas y ya de paso mandarme pensamientos positivos para aprobar a la primera este Sábado.

La receta también la tenéis en formato vídeo para que la disfrutéis en otro formato, como siempre al final del post os dejo la ventanita. Os dejo con la receta.

Ingredientes

150 ml de aceite de girasol o de oliva suave
200 ml de zumo de naranja recién exprimido (2 o 3 naranjas)
180 g de azúcar
350 g de harina
1 cucharadita de levadura
la ralladura de 1 naranja
3 huevos L
1 pizca de sal



Preparación

En el bol  de la batidora batimos los huevos hasta que empiecen a espumar y añadimos el azúcar. Batir hasta que la mezcla doble de volumen y blanquee.
Añadimos el aceite sin dejar de batir, la ralladura de naranja y  seguimos batiendo unos segundos.
Tamizamos la harina junto la levadura en el mismo bol y añadimos la pizca de sal. Mezclamos con la batidora apagada para no formar una nube de harina y seguidamente añadimos el zumo de naranja  sin dejar de batir a velocidad media.
Engrasamos con spray desmoldante o mantequilla un molde de unos 20-22 cm redondo, rectangular o cuadrado. En mi caso e utilizado un molde para bundt cake que estaba desenado estrenar desde hace mil años.
Vertemos la masa en el molde. Le damos unos golpecitos al molde para que la masa llegue a todos lo huecos y también para que la superficie se que lisa.

Horneamos 180º unos 30-35 minutos con calor arriba y abajo sin aire.

Una vez horneado dejamos reposar unos minutos el bizcocho en el molde, ya que esto nos facilitará el desmoldado y dejamos enfriar por completo sobre una rejilla.


Aquí tenéis la ventanita para verla en formato vídeo.




Por cierto no sé si la semana que viene habrá receta, os aviso de ante mano porque hacer la receta, grabarla, editarla, hacer las fotos y un largo etcétera no me dará la vida para hacerla en un día.

Millones de besos 

abril 23, 2018

GALLETAS DE PLÁTANO Y COCO CON CHISPAS DE CHOCOLATE


¡¡Buenos días!! Después de varias semanas de recetas con más elaboración o más trabajosas.....Esta semana e pensado en algo más sencillo y para elaborar/ entretener a los más peques de la casa, mientras llega el buen tiempo cosa que se está haciendo de rogar.
En el blog tenéis un montón de variedad de recetas de galletas; las típicas cookies, veganas, de avena, rellenas, decoradas, sin lactosa, rebozadas, de pistola , de dos colores, de leche condensada y así podría seguir...... Como el mismo nombre del blog evoca lo que más predomina en él son las galletas.

Así que si sois como yo, galleta adict@s este es vuestro blog ( aquí haciendo spoiler a tope)


Es una receta super rápida de hacer y seguramente casi todos los ingredientes los tenéis por casa. En el caso que no tengáis alguno como la leche de coco o el coco en copos lo podéis sustituir por otra vegetal pero perderá ese punto a sabor a coco pero no variará el resultado final.
La textura de estas galletas son de esas ternitas de corazón y crujiente por los bordes, pero si hacéis las porciones más pequeñas y las extendéis un poco con el dorso de una cuchara os saldrán más crujientes.
Si, si no paro de hablaros de la textura pero no os hablo del sabor y es que os podría contar maravillas ( siempre y cuando os guste el plátano) ya que el sabor que más predominante es el plátano y tiene pequeños ápices de coco. Las chips de chocolate le dan ese toque adictivo que te hace comente una detrás de otra hasta que te das cuentas que te has comido más de la mitad.


Lo mismo me pasó cuando me puse a fotografiarlas, que me puse hacer una foto tras otras y cada cual más bonita. El problema venido cuando me ha tocado elegir las que formarían parte del post.
No os exagero pero e acabado con una lista de unas 15 fotos de 20 que hice y me ha sido super compilado desechar las 11 restantes pero suerte que esta vez la receta también va en formato vídeo así que ahí pondré una gran parte de las fotos restantes, para quitarme ese así viva de bonicura.


Como siempre os compartiré la ventanita del vídeo al final del post y en las RRSS.

Sin más dilación os dejo con la receta.


Ingredientes (16-24 unidades)

90g de mantequilla en textura pomada
300 g de haria
225 g de azúcar
1 y 1/2 de plátano maduro
1 cucharadita de vainilla
1 cucharadita de levadura o impulsor
100 g de chispas de chocolate
2 cucharadas de bebida de coco
30 g de coco copos
1 pizca de sal


Preparación

Ponemos a precalentar el horno a 180º.

En un bol batiremos la mantequilla junto con el azúcar, hasta que empiece a quedar una textura ligeramente cremosa.
Añadimos los plátanos triturados o bién chafados con el tenedor, la leche/bebida de coco y la vainilla.Batimos unos segundos hasta que todos los ingredientes estén bién incorporados.

Tamizamos la harina, junto con la levadura o impulsor y la pizca de sal. Mezclamos hasta obtener una mezcla homogénea.
Añadimos una gran parte de las chispas de chocolate, reservando unas pocas para colocar sobre las galletas sin hornear y los copos de coco. Mezclamos ayudándonos de una espátula.

Preparamos un par de bandejas de horno con papel de horno y ayudándonos con una cuchara dispondremos pequeños montones de masa de la medida de una nuez, colocamos un poco de chispas de chocolate en cada montón (esto es opcional) y llevamos al horno unos 15 minutos.
Una vez horneadas las galletas las dejamos que enfríe por completo en ella ( aún estarán blanditas para manipularlas).

Las podemos conservar en una lata para galletas o en un recipiente hermético durante 2 semanas.





Aquí tenéis la receta en formato vídeo.



Nos vemos las semana que viene con otra nueva receta.

Besosss a puñados.

marzo 26, 2018

ROSQUILLAS DE NARANJA Y MANZANA


¡¡¡Muy buenos días de lunes !!! Aunque aún se está resistiendo un poco en venir la primavera y empezamos a tener los primeros rallitos de sol que hacen que nos paremos unos segundo frente a él para que nuestro cuerpo empiece a absorber su energía. Y después de nuevamente sufrir el cambio de hora, que a mi personalmente me provoca una hecatombe el cual mi cuerpo necesita semanas para volver a un estado "normal" y siempre me lleva a pensar lo mismo.... porque demonios lo seguirán haciendo cuando hoy en día la gran mayoría de fabricas funcionan las 24 horas y no se produce un ahorro de energía.

Pero ahora vamos a lo que vamos.
A finales de la  semana pasada  os compartí una receta de  pestiños al horno (os comparto el enlace), pues bién esta semana para completar mis sugerencia o añadir al recetario del blog algunos dulces más sobre temática tradición o mejor dicho Semana Santa me vinieron a la cabeza estas rosquillas con un punto diferente a las tradicionales. Estas se preparan igual que las tradicionales ( fritas en abundante aceite) pero en este caso la masa lleva un par de ingredientes que le dan ese toque diferente, ya que al pegarle un bocado te encuentras esos pequeños trocitos de almendras que le dan un toque más crujientón y con la manzana que le aporta jugosidad, hacen de estas rosquillas una maravilla.

Como voy con poco tiempo porque tengo a los dos peques en casa y esto hace que vaya a toda velocidad escribiendo (perdonad si hay faltas de ortografías y palabras mal escritas o a medio escribir), no me voy a enrollar más y os voy a dejar con la receta.

Ingredientes

El zumo y la ralladura de 1 naranja
530 g de harina
30 g de almendras picadas
2 huevos
1 manzana triturada o licuada
70 g de azúcar
100 ml de aceite de oliva
1 taponcito de anís ( yo e utilizado el mismo de la botella)
1/2 cucharadita de canela
Aceite de girasol para freír las rosquillas
Azúcar y 1 cucharadita de canela para rebozarlas



Preparación

En un bol amplio batimos los huevos con el azúcar. Añadimos a la mezcla el aceite, el anís, la canela y mezclamos unos segundos con las varillas.
Rallamos la piel de la naranja y exprimimos su zumo. Añadimos a la masa, mezclamos y seguidamente añadimos la manzana triturada o licuada, mezclamos unos segundos más.
Ahora iremos añadiendo poco a poco la harina que previamente habremos tamizado, las almendras y amasaremos hasta que la masa se despegue del bol o se desprenda de nuestras manos.

Dividimos la masa en pequeñas porciones y formaremos tiras cilíndricas las cuales uniremos sus extremos para formar las rosquillas.

En una sartén onda o el un cazo amplio calentaremos el aceite junto un poco de piel de naranja ( lo de la piel de naranja es opcional), calentaremos sin dejar que humee. Introduciremos las rosquillas e iremos dorándolas y girándolas con la ayuda de una espátula para que se doren por todos sus lados.
Os recomiendo que el fuego no esté muy fuerte ( fuego medio) ya que podrían dorarse pero quedar crudas por dentro.

Dejamos enfriar sobre papel absorbente y seguidamente las rebozamos el azúcar con una cucharada de canela.



Me despido a toda velocidad que estos dos están muy callados y cuando callan otorgan ( si sois padres/madres ya me entendéis).



Nos vemos la próxima semana con otra nueva receta.
Besossssss

marzo 22, 2018

PESTIÑOS AL HORNO


Buenos días de jueves!!! Sí, si de jueves.Aunque siempre publico los lunes esta semana de extra os traigo otra receta. Como estamos a nada de la Semana Santa y la semana que viene me será más complicado estar más activa por las redes sociales, ya que los críos tienen fiesta y me sería más difícil compartiros las dos recetas que he preparado para esta festividad, se me a ocurrido compartiros una esta semana y la otra como siempre el lunes que viene.
Las dos recetas también las tendréis disponibles en formato vídeo en mi canal de Youtube para los que no os gusta esto de leer tanto.

Como podéis leer en la entrada de la receta, os traigo una receta muy muy tradicional pero está preparada de manera diferente. Ahora viene y si es tradicional como puede ser diferente, pues muy sencilla, esta receta está preparada en el horno y no como la receta tradicional que se hace fritas en abundante aceite como los churros, las rosquillas,las torrijas, etc.

Yo al principio tenia mis dudas pero unas vez preparadas todas esas dudas se enfusaron, el sabor es exactamente igual pero el inconveniente o en mi caso es todo lo contrario ya que son muchísimos más saludables, sería que no son tan aceitosos aunque a muchas personas le gusta ese punto de chop-chop como suelo decir yo.

La dificultad de la receta es mínima y la tendréis preparada en menos de media hora contando hasta el horneado.

Si os animáis hacer la receta y encontráis alguna diferencia en sabor o textura me encantaría que me lo hicieseis saber, ya que en mi caso no la e notado  quitando como os e comentado más arriba el tema de aceitosos.

Sin más rodeos os dejo con la receta.



Ingredientes

275 g de harina
70 ml de licor de anís
80 ml de vino blanco
1 naranja ( la cascara)
15 g de anís verde en grano
20 g de sésamo o ajonjolí
100 ml de aceite de oliva
250 g de miel

Preparación

En un cazo calentamos el aceite junto con la cáscara de naranja para aromatizarlo.
En un bol amplio pendremos la harina y añadimos el aceite (sin la cáscara), removemos con una cuchara de palo, hasta que los ingredientes estén integrados.

Ahora añadimos el licor de anís, el vino blanco y amasamos. Integramos el sésamo y los granos de anís, amasamos hasta que tengamos una masa suave.

Enharinamos la superficie de trabajo y estiramos la masa en una plancha cuadrada de un grosor de 1 mm.
Ponemos a precalentar el horno a 200º.

Cortamos la masa en porciones cuadradas de unos 8 cm (nos podemos ayudar con un cortador de pizza). Doblamos los lados opuestos, llevándola al centro y superponiendo uno sobre el otro. Las depositamos sobre la bandeja de horno con papel de horno y horneamos entre 10 -15 minutos.
Dejamos que templen y bañamos nuestros pestiños con la miel.

Podemos conservarlos en una lata forrada con papel de horno.



Os dejo también la ventanita de la vídeo receta, justo aquí abajo.



Espero que disfrutéis de la receta, nos vemos el lunes con otra receta para Semana Santa.
Besosssss

marzo 19, 2018

GALLETAS DE AVELLANAS



Buenos días de lunes!!! Esta semana os traigo una receta muy, muy sencilla de preparar pero al mismo tiempo están tan, tan ricas que no me he podido resistir a no compartirla con vosotr@s.
Las preparé super rápido, ya que  la masa  NO necesita refrigeración, NO lleva grasas como mantequilla/aceite y aunque si que os tengo que decir que lleva muchísimo azúcar, debo mencionar que la receta original aún llevaba muchísisimo más.... como el doble. Y yo fui bajando los gramos de azúcar hasta que no afectase a la masa antes y después del horneado.

Seguramente esteréis pensando......le podríamos poner pepitas de chocolate......Mi respuesta SIIIIII y tanto, pero mejor que sea negro al menos con el 70% de cacao para no endulzar más las galletas.

También podéis optar por dejar las avellanas en trozos más grandes ( los 35g que pico con el cuchillo)



De la receta poco más que contaros, simplemente que las probéis y me digáis que os parecen. Y si hacéis vuestra versión de la receta que la compartáis en la redes para que yo la pueda ver y poneros un comentario.

Os dejo con la receta, empezando con la lista de ingredientes.


Ingredientes

70 g de avellanas
1 clara de huevo
120 g de azúcar
1/2 cucharadita de vainilla
45 g harina de avena

Preparación

Precalentamos el horno a 200º

En un procesador de alimentos trituramos la mitad de las  avellanas junto con la avena en el caso que la tengamos en copos.
Por otro lado, en un bol vertemos el azúcar, la vainilla, la otra mitad de avellanas que habremos cortado levemente con un cuchillo y la clara de huevo. Mezclamos hasta que los ingredientes se junten. Añadimos las avellanas con la avena ( lo del procesador) y mezclamos hasta que todos los ingredientes estén bien incorporado sin sobre mezclar.

Preparamos una bandeja de horno con  papel de horno y con la ayuda de una cucharita iremos depositando pequeñas cantidades de masa dejando una separación de unos 2 cm entre galleta y galletas.
Horneamos unos 8 o 10 minutos ( 8 si las queremos con textura ternita y 10 si nos gustan crujientes), dejamos enfriar las galletas en la misma bandeja y cuando ya las tengamos frías las podremos guardar sin el temor que se ropan.

Las podemos conservar un par de semanas en una lata para galletas.



Y si las bañamos en chocolate están de locura, esta foto os la comparto para que veáis que también tienen pintaza con chocolate.

Os dejo también la ventanita para la vídeo receta.



Nos vemos la próxima semana con otra nueva receta.
Kissessssss

marzo 12, 2018

PARIS-BREST



¡¡¡¡Muy buenos días de lunes!!!! Esta semana os traigo un super recetón. Esta receta es un clásico en la repostería francesa pero para entrar más en profundidad os voy a poner un poco en historia.

Esta tarta recibe dicho nombre en honor a la carrera de bicicletas que se celebró en 1891 entre París y Brest. Está realizada en una masa parecida a los profiteroles y puede ir rellana de una crema de manteca y café o praliné.
La forma de dicha tarta fue idea de Pierre Giggard un aficionado al ciclismo y periodista moderno de la época, que junto a un pastelero parisino llamado Louis Durand que fue el que horneó dicho manjar crearon semejante dulce.
A día de hoy esta exquisitez puede tener forma rectangular ya que con la revolución de cubismo (1907-1914) muchos pasteleros despojaron el pastel de su clásica forma.

Ahora que ya os he historiado un poco sobre el postre de esta semana, me toca el momento de explicaros mis impresiones sobre la receta.

La receta me trajo loca, así literalmente. Cuando tenia la masa gordita, pomposa, dorada y un largo etc. Apagaba el horno y chofffffff eso se quedaba todo para abajo, revisé como 20 veces la receta original de donde la saqué pero por más que le daba vueltas de posibles errores que hubiese podido cometer no los encontraba.

Me habré dejado algún ingrediente, habré hecho mal la corona, el tiempo de horneado, la mas poco consistente.......Y así durante días.
¡¡Ojo!! no miento díasssss.

Preparé la corono como unas 3 o 4 veces  y 2 veces la crema, porque después de tal desesperación la rellené  después del segundo intento y pesé esto se queda así. Pero como esa amargura de perfeccionismo me puede más que cualquier otra cosa decidí volver a repetirla tantas veces como fuera posible hasta que encontrase el fallo.

Después de 4 coronas encontré el problema. La masa estaba perfecta pero lo que fallaba era el horneado, en la receta original  te ponía hornear con la puerta abierta de 30 a 40 minutos y ahí estaba uno de los  fallos, el otro fallo era que no ponía que esta masa tiende a bajar una vez horneada y que para darle altura muchas veces se realizando dos coronas, una simple y otra con 3 vueltas (más abajo os lo explico mejor).
Una vez solucionado el  problema y rectificado los posibles errores, os puedo decir que habemus pastel.
¡¡Y dios que pastel!! os puedo asegurar que todo lo que había leído sobre él es 100% real, el conjunto en si es exquisito, tiene ese punto de....va otro trocito y un poquito más. Después de todo el quebradero de cabeza a valido la pena esta recompensa.

Ostras, sin darme cuenta me e liado y esto a acabado siendo un post de medio kilómetro. Lo único que me falta por deciros es que os dejo con la lista de ingredientes.




Ingredientes

Masa

150 ml de leche
100 ml de agua
100 g de mantequilla
30 g de azúcar
150 g de harina tamizada
4 huevos
30-40 g de almendras laminadas para decorar
1 yema de huevo + 2 cucharaditas de leche para pincelar
azúcar glas para decorar

Crema pastelera

500 ml de leche entera
125 g de azúcar
50 g de maicena
1 cucharadita de vainilla
2 yemas de huevo

Crema Praliné

125 g de mantequilla T.A
150 g de praliné



Preparación


Masa

Empezaremos preparando la masa (es una masa parecida a la de los chus). Para ello en un cazo pondremos el agua, la leche, el azúcar y la mantequilla en daditos para que se derrita más rápido, llevaremos a ebullición.
Añadimos la harina tamizada y removemos con una cuchara de palo enérgicamente. Volvemos a poner el cazo en el fuego a calor medio-bajo y removemos la masa durante unos 4 minutos hasta que la masa coja consistencia (esta tiene que despegarse de las paredes del cazo y secarse levemente).
Quitamos el cazo del fuego  y una vez fuera del fuego añadimos los huevos uno a uno, hasta que el primero no esté integrado no añadimos el siguiente (Otra opción es verter la masa del cazo en el bol de la batidora y con el accesorio pala ir mezclando los huevos igual, de uno en uno,  pero esto nos reduce el tiempo de preparación).

La consistencia resultante tiene que ser la siguiente, cuando al sacar la espátula la masa forme una especie de punta.Os adjunto foto.



Precalentamos el horno a 180º y rellenamos una manga pastelera con una boquilla redonda amplia o simplemente hacemos un corte amplio en la manga.
Preparamos una bandeja de horno con papel de horno/ sulfurizado y con la ayuda de un rotulador comestible o lápiz hacemos un círculo de unos 18 cm en el papel.

Trazamos una corono con la masa sobre el patrón  y luego hacemos otra alrededor  de la misma sin dejar apenas espacio. Por ultimo hacemos una tercera encima de la dos " a caballo sobre las dos anteriores".
Seguramente nos sobre masa, así que una opción para que la tarta quede más alta en la preparación final es hacer en otra bandeja aparte otro corona más simple, sin hacer el tercer círculo.

Batimos la yema con la leche y pincelamos toda la masa (esto le aportará brillo) y decoramos con las almendras laminadas (si hacéis las dos coronas, la simple no irá ni pincelada, ni decorada)
Horneamos unos 40-50 minutos con la puerta cerrada y cuando queden unos 10 minutos para acabar abrimos la puerta del horno, la aguantamos con el mango de una espátula o cuchara de palo para que no se cierre (esto hará que salga el vapor y así obtenemos la textura perfecta de masa).



Crema pastelera

Mientras que se va horneado podemos ir preparando la crema pastelera.
En un cazo calentamos la leche con la vainilla, hasta que hierva.
Por otro lado en el bol apto para microondas ponemos la yemas, junto con el azúcar y la maicena, batimos hasta que blaquee.
Vertemos un poco de leche y removemos. Añadimos el resto de leche y mezclamos hasta que esté homogénea.
Llevamos el bol al microondas y en golpes de 2 minutos vamos calentando la crema, sacamos removemos y así hasta que esta espese  (unos 4-6 minutos, dependerá de la potencia del microondas).
Tapamos a piel y dejamos que enfríe por completo.


Crema praliné

En el bol de la batidora ponemos la mantequilla y batimos hasta que esté cremosa (esto también lo podéis hacer a mano), añadimos el praliné  y seguimos mezclando  unos segundos.
Añadimos la crema pastelera una vez fría a la mezcla anterior .
Preparamos una manga pastelera con la boquilla 1M de wilton o la que más os guste y reservamos.


Montaje

Cortamos nuestra corona por la mitad ( en el caso que hayáis hecho las dos no hará falta, ya que la simple será la base y la primera decorada será la superior).
Rellenamos la corona con la crema praliné, tapamos con la tapa de corona y llevamos un mínimo de 2 horas a la nevera.

Antes de servir espolvorear azúcar glas para darle el toque final.




Por cierto antes de despedirme os dejo un pequeño apunte.
Podéis hacer el praliné casero, en mi caso lo hice super rápido. Compré almendras en gano y las hice como si fuesen garrapiñadas.

Os dejo la receta aquí:

PRALINÉ

200 g de almendras en granillo
450 g de azúcar
125 g de agua

Preparamos una bandeja de horno con papel de horno/sulfurizado
En una sartén tostamos las almendras.
En un cazo ponemos el azúcar con el agua y removemos hasta que el azúcar se disuelva. Cuando empiece a hervir dejaremos que siga hierviendo durante 6-8 minutos, hasta que adquiera un color dorado oscuro.
Retiramos del fuego, añadimos las almendras y volcamos en la bandeja de horno. Tened  cuidado porque la mezcla estará super caliente.
Dejamos reposar 15 minutos para que endurezca y para añadirla a la masa la trituraremos en un procesador de alimentos.


Ahora si que ya me puedo despedir......Nos vemos la semana que viene con otra nueva receta.
Millones de besos.


marzo 09, 2018

CREMA DE AVELLANAS O NUTELLA CASERA : MI VERSIÓN



Buenos días galleter@s!!! Seguramente habréis visto muchas versiones de la este tipo de crema pero en mi caso llevaba tiempo intentado hacer mi versión y si encima no hacia falta ningún tipo de edulcorante muchísimo mejor.
Cuando preparé una de las primeras pruebas, la consistencia no me llegaba a convencer ya que era muy espesa y poco untuosa. La segunda versión si que me gustaba la consistencia pero para endulzar la crema utilicé sirope de agave pero buscaba un algo más.
Después de bastante tiempo sin tiempo, valga la redundancia, hace un par de semanas pude desempolvar mi libreta de recetas que me gustaría hacer con sus diferentes pruebas realizadas en los últimos tiempos.

Al ponerme a echarle un ojo a esta receta en concreto, me vino a la cabeza que diferentes diferentes frutos secos podrías sustituir el sirope, Así que me puse a volver hacer pruebas.....primero con pasa, con orejones y finalmente me vino a la cabeza gracias como a un refrán , los dátiles (los dátiles son dulces como la miel) y ahí di en el clavo.

Los dátiles es un fruto rico en hierro, potasio, alto en carbohidratos, fósforo, vitamina A, tiamina, riboflavina, niacina, triptófeno y àcido ascórbico. También en medicina considerado muy beneficioso en enfermedades como el asma, bronquialtis, tos  entre otras muchas más. Así que mejor que hacer una prueba con los dátiles.

Y como siempre os hago cuando algo me gusta os lo comparto y esta receta no podía ser menos, para mi una versión que les encantará a los más peques y encima estaréis super satisfech@s de que comen algo sano.

Espero que os guste mi versión de nutella casera y que disfrutéis de ella en muchas recetas.




Ingredientes

130 g de avellanas
100 ml de leche vegetal (coco, almendras, etc)
2 cucharadas de aceite de coco
3 cucharadas de cacao en polvo
6 o 7 dátiles
1/ 2 cucharadita de extracto de vainilla


Preparación

En un procesador de alimentos pondremos las avellanas junto con los dátiles deshuesados. Trituraremos hasta que obtengamos una especie de pasta. Para facilitarnos el triturado podemos verter un poco de leche vegetal.
Añadimos al procesador las cucharadas de aceite de coco, el cacao, la vainilla y el resto de leche. Trituramos unos 3 o 4 minutos, hasta que veamos que la mezcla sea homogénea

Una vez tengamos nuestra crema de cacao o de nutella casera lista la vertemos en un envase de cristal y la conservamos en él durante 1 semana. En el caso que haga mucho calor es mejor conservarla en la nevera.




También os comparto la versión en video por si os interesa en este formato.



Nos vemos en la próxima receta, millones de besos.